Para producir semillas será necesario familiarizarse con algunas nociones básicas de botánica, el conocimiento de las plantas.
Hasta ahora, las plantas han sido clasificadas en función de la anatomía de sus flores, sus órganos reproductores y sus frutos.
Son catalogadas con un nombre en latín. La nomenclatura en latín permite clasificarlas de manera más precisa, dado que los nombres comunes pueden crear ciertas confusiones.
La palabra “zapallo” o «calabaza», por ejemplo, se usa para nombrar especies muy diferentes entre sí, como la Cucurbita Pepo, la Cucurbita Moschata o la Cucurbita Maxima.
En estos videos solamente se utilizarán algunos términos en latín: las familias, como por ejemplo las fabáceas, las asteráceas, las solanáceas o las cucurbitáceas; los géneros, como el Cucurbita; las especies como la Cucurbita maxima y las variedades.
El pepino, por ejemplo, forma parte de la familia Cucurbitacea, del genero Cucumis, y de la especie Cucumis Sativus y tiene muchas variedades.
El melón, por su parte, también forma parte de la familia Cucurbitaceae y del mismo género Cucumis, pero de una especie diferente, Cucumis melo y también tiene múltiples variedades.
Por variedad se entiende aquellas plantas que se parecen en su aspecto y en sus características genéticas. Todas las variedades que pertenecen a una misma especie pueden cruzarse entre si.
Las variedades que pertenecen a distintas especies casi nunca pueden cruzarse entre sí. Por ejemplo, no hay riesgo de cruce entre un pepino y un melón.
Pero hay algunas excepciones. A veces es posible que se crucen especies que son botánicamente cercanas, como por ejemplo la especie cucurbita moschata y la especie cucurbita argyrosperma.
Entre diferentes géneros, el cruce es imposible.
Conocer la clasificación botánica de nuestras plantas, nos permite adaptar el método de cultivo adecuado para producir semillas, evitando cruces indeseados.

Para producir semillas será necesario familiarizarse con algunas nociones básicas de botánica, el conocimiento de las plantas.
Hasta ahora, las plantas han sido clasificadas en función de la anatomía de sus flores, sus órganos reproductores y sus frutos.
Son catalogadas con un nombre en latín. La nomenclatura en latín permite clasificarlas de manera más precisa, dado que los nombres comunes pueden crear ciertas confusiones.
La palabra “zapallo” o «calabaza», por ejemplo, se usa para nombrar especies muy diferentes entre sí, como la Cucurbita Pepo, la Cucurbita Moschata o la Cucurbita Maxima.
En estos videos solamente se utilizarán algunos términos en latín: las familias, como por ejemplo las fabáceas, las asteráceas, las solanáceas o las cucurbitáceas; los géneros, como el Cucurbita; las especies como la Cucurbita maxima y las variedades.
El pepino, por ejemplo, forma parte de la familia Cucurbitacea, del genero Cucumis, y de la especie Cucumis Sativus y tiene muchas variedades.
El melón, por su parte, también forma parte de la familia Cucurbitaceae y del mismo género Cucumis, pero de una especie diferente, Cucumis melo y también tiene múltiples variedades.
Por variedad se entiende aquellas plantas que se parecen en su aspecto y en sus características genéticas. Todas las variedades que pertenecen a una misma especie pueden cruzarse entre si.
Las variedades que pertenecen a distintas especies casi nunca pueden cruzarse entre sí. Por ejemplo, no hay riesgo de cruce entre un pepino y un melón.
Pero hay algunas excepciones. A veces es posible que se crucen especies que son botánicamente cercanas, como por ejemplo la especie cucurbita moschata y la especie cucurbita argyrosperma.
Entre diferentes géneros, el cruce es imposible.
Conocer la clasificación botánica de nuestras plantas, nos permite adaptar el método de cultivo adecuado para producir semillas, evitando cruces indeseados.